Black Summer

El presidente de los Estados Unidos está a punto de responder a las preguntas de los periodistas antes de retirarse a pasar el día de la independencia en Camp David.

De repente este personaje irrumpe en la sala de prensa cubierto de sangre, se trata de John Horus, el miembro más popular del grupo de Superhéroes: Seven Guns, humanos con implantes tecnológicos que los convierten en armas humanas.

Y suelta el siguiente discurso:

“Buenos días, soy John Horus. Hace 10 minutos, ejecuté al presidente de los Estados Unidos, y al vicepresidente, y a varios de sus consejeros.

También he tenido que matar o herir a varios agentes del servicio secreto, hecho que lamento.

No tengo más objetivos, he sellado esta habitación y estáis completamente a salvo conmigo. Sólo os pido que escuchéis lo que tengo que deciros.

Nuestra tarea es luchar contra el mal.

Vosotros nos permitís luchar contra la injusticia, no tenéis que pagar por nuestros servicios, lo hacemos porque es nuestra voluntad, y porque hemos desarrollado las capacidades para hacerlo.

Vuestros políticos no nos tocan porque somos dinamita: salvamos vidas, y no hemos causado una sola muerte colateral en los últimos tres años, pero se espera que nos crucemos de brazos mientras esta administración comete crímenes.

Lamento que no estuviéramos en New York el 11 de septiembre, ninguno de nosotros podía saber de antemano que la lucha contra una amenaza en el exterior de los Estados Unidos coincidiría con el ataque al World Trade Center, de hecho creo que fuimos conducidos fuera del país de forma deliberada.

Creo que la guerra en Irak es ilegal y está basada en mentiras, creo que nuestra gente y la suya está muriendo para beneficio de las Corporaciones, creo que ahora América es libre.

Creo que nuestro silencio consiente el uso generalizado de la tortura que hacen nuestras autoridades electas, creo que esta administración robó las últimas dos elecciones, y que estamos viviendo bajo el gobierno de criminales, esto no es cuestión de fe, está basado en hechos que han sido silenciados o suprimidos en este país.

Estamos viviendo bajo el ala del Mal.

No estaría siendo sincero conmigo mismo si dejara que esto continuase. No estaría siendo sincero con la gente que cree que estoy aquí para defenderlos del Mal.

No seré detenido por este acto, no me rendiré a ninguna autoridad, no es tiempo de actos tales.

Quiero que todos os toméis el día de mañana para reflexionar sobre la Independencia, para reflexionar sobre la Libertad, y pasado mañana, quiero ver los preparativos para celebrar elecciones libres e inmediatas, comenzamos de nuevo. Haréis vuestros votos con papel y lápiz, serán contados, estaré en todas partes, me encargaré de que el proceso sea limpio.

No sabéis de lo que soy capaz, no me provoquéis.

Entiendo que ahora  mismo muchos de vosotros estaréis asustados, por favor: este no es un acto terrorista, esto no es un golpe de estado, se trata simplemente de un hombre poniendo fin a la libertad de criminales peligrosos para el espíritu americano.

Desde que me convertí en John Horus, dediqué mi vida a intentar manteneros seguros. No me juzguéis. Aceptad que hago esto por mi amor hacia vosotros y vuestra libertad.

Si tenéis un Dios, rezad por mí esta noche, porque he hecho algo terrible que me acompañará por el resto de mis días, sólo para salvaros. Gracias por escucharme.”

El tipo aparte de llamarse Horus tiene el ojo que todo lo ve por todas partes :cinturón, casco, espalda…

O bien el autor quiere liarnos como siempre hacen los agentes iluminatis haciendo que el que parece el salvador es uno de ellos, o tal vez el autor se burla de los iluminati haciendo que su ejecutor lleve sus propios simbolos.

Ahora fijemonos en el protagonista del comic, Tom Noir, uno de los fundadores de los Seven Guns, lo primero que dice al ver el discurso de Horus por la tele es: “Dios, John. ¿Qué has hecho? Maldito loco”

Una explosión mató a su novia y a él lo dejo tullido, se pasa los años bebiendo mientras ve la televisión, la casa infestada de cucarachas que seguro que se le pasean por la cara mientras duerme.

Un borrego de libro, esclavo hasta la medula y a mucha honra.

La TeleProgramación es su Dios y los periódicos sus profetas, drogas, alcohol y el tabaco, los ángeles que revolotean por su cabeza. Nunca cuestiona nada a su Dios porque requeriría un mínimo de esfuerzo mental, y si lo sacas de su programación inicial, sus creencias, implantadas por padres, amigos y profesores, puede llegar a enloquecer totalmente.

Es un idiota elevado a la máxima potencia, un moñas integral que o bien se autoconvence de que no lo es o bien lo asimila regocijándose en su propia mierda porque le han programado para creer que ese es su lugar por derecho de nacimiento.

Fijaos lo que le dice este mojón con ojos a su compañera momentos después de la declaración televisada de Horus:

“Mi idea era combatir la corrupción policial, la vigilancia ilegal y a las bandas del Crack que estaban transformando mi barrio en una narcocracia…”

Vamos que se hizo superhéroe para combatir a los raterillos, al verdadero mal no se le debe molestar.

El comic esta dibujado por el genial dibujante español : Juan José Ryp.